11 de noviembre de 2009

El dia de San Martín.


La verdad es que no sé por qué se le llama el día de San Martín (Martinstag), cuando realmente debería llamarse la noche de San Martín.

Para todos los que no estais aquí y no lo conoceis, os diré que el "dia" de San Martin es una noche de fuego y luz.
Para los niÑos, que durante semanas se han estado preparando para esta noche tan especial es la gran noche.
Con papel y otros materiales preparan unas lamparitas (laternen) con las que salen a pasear por las calles cuando ya el sol se ha puesto.
Suelen cantar las canciones típicas de San Martin:

Once de noviembre es el día
en que mi linternita
en que mi linternita
Once de noviembre es el día
en que mi linternita puede dar luz

A cambio reciben golosinas y otros pequeÑos obsequios.

Se cree que ésta es la tradición Europea más parecida al Helloween de los americanos.
Cuenta la leyenda, que San Martín cabalgaba con su caballo cuando se topó con un pobre mendigo. Como hacía mucho frío, sacó su espada, partió su abrigo en dos y le dio una mitad al anciano.

Después de la cabalgata iniciada por el jinete a caballo y seguida de luces infantiles, se encuentran todos los "farolillos" en un sitio determinado en el que cada pueblo ha preparado su "fuego de san Martín". Por lo general en la plaza del ayuntamiento o algún parque cercano.

El fuego de San Martín no es otra cosa que una enorme hoguera (controlada ;) que pone punto final a esta bonita noche.

Ver la ilusión de los críos reflejada en la luz de sus farolillos es bonito y una tradición que no debe perderse y que sigue deleitando a pequeÑos y a grandes.

La de farolillos que inventaría yo si no fuera tan mayor...

24 de octubre de 2009

De paso...


Están de paso... los gansos.
Vuelan de norte a sur y nos deleitan con sus graznidos de otoÑo.
Cuando ellos vienen, ya no hay vuelta atrás.
El verano acabó y el otoÑo está en su mejor etapa.

Otras aves, más leales, más resistentes, se quedan a las orillas del Rin y de arroyos de la región y se preparan para su largo sueÑo, del que sólo despetarán cuando el sol nos muestre de nuevo su mejor cara, y todo se vuelva verde, amarillo, rojo... multicolor, otra vez.

Esta época también tiene su encanto, con su colorido rojizo, anaranjado, amarillento.
Me gusta pasar las horas a la penumbra del fuego, leyendo un libro y oyendo el viento fuera, el agua al caer contra el tejado, el sonido de la naturaleza.
Y es que soy afortunada, de vivir en este lugar lejos del estrés de las ciudades, donde el mundo todavía está en orden. Los bosques del Westerwald, de árboles centenarios y tradición granjera vuelven en esta época del aÑo a su mayor esplendor devolviendonos la calma interior que necesitan nuestros cuerpos.

Los que estais aquí y podeis... disfrutadlo!

5 de octubre de 2009

OtoÑo del 2009


Aquí en Alemania ha entrado de lleno el OtoÑo, pero nada de un otoÑo agradable de colores cálidos y dias soleados como en pasados aÑos más afortunados.
NO. Este aÑo la lluvia ha entrado a saco y no nos dá un respiro.
Por las maÑanas una lluvia de esas con poco cuerpo que casi no se notan al caer, pero que calan hasta los huesos.
Por las tardes, de esas lluvias torrenciales que al caer contra el tejado crean gran estruendo, y por las noches, simplemente... más lluvia.
El pronóstico del tiempo para maÑana, es más bien... reservado.
La esperanza de que mejore, no sobrepasa a la ya más que temida sospecha de que segirá LLOVIENDO!!! Y mientras tanto... con los pies fríos y el ánimo cansado, nos preparamos para lo que será de nuevo UN LARGO INVIERNO.

Firmado: una "deprimida" fan del verano.

16 de abril de 2009

Yogures caseros (más ricos que compraos!!!!!)


Después de ver el interes que han despertado mis yogures, me he decidido a dedicar una esquinita de mi blog a explicaros cómo los hago...
Ya vereis qué facil:

1. Se prepara la yogurtera, con todos sus vasitos.
Se pueden hacer yogures normales, o se pueden hacer con frutas y mermeladas y esas cosas. La variante que hoy nos ocupa es de mermelada de fresa (Ñam Ñam...).


2. Se cubre el "culito" ;o) de cada vasito con mermelada de la que más nos guste... a mí la de fresas me encanta! Pero tambien se pueden echar otras, o incluso trocitos de fruta o compotas...


3. Después se mezclan un yogur y un litro de leche.
Importante es que la grasa del yogur sea igual a la del litro de leche, o sea, 1,5 o 3,5 para los dos lo mismo. En EspaÑa le decis, entera a 3,5 y semidesnatados a los 1,5 (creo!).


4. Pues eso, que se mezclan con unas varillas, despacito al principio y luego normal... para los nerviositos como yo... tan aprisa que casi no se vé la mano! A que no os sale?

5. Una vez bien mezclado (cuando solo es un líquido) se echa la mezcla en los vasitos que previamente hemos rellenado con mermelada. Se echa lentamente (para los nerviositos, en fín por una vez tranquilidad y sosiego!) pues si se echa de golpe la mermelada o las frutitas se lian a flotar por todo el vaso y luego no nos cuaja el yogur!!! Cuidadín!!!

6. Para terminar se les pone la tapa a los vasitos (qué monos! de colorines!) y se meten en la yogurtera todos juntos.


7. Se enciende la yogurtera y se deja como mínimo unas nueve horas. Sí, no habeis entendido mal. Nueve horas. Yo normalmente los pongo por la noche un par de horas antes de irme a la cama y lo quito al levantarme...


Y ya está!!!! Qué facil eh?
bueno sólo me queda decir, que aunque no estén muy calientes cuando se retiran por la manana es conveniente que se enfrien antes de probarlos. Es como con las torrijas, que calientes empachan y no están tan buenos...
Además es importante, que mientras están calientes no se muevan o se agiten, pues se quedan muy líquidos.

Pues creo haber pensado en todo. Espero que las fotos os sean de ayuda.

Que os salgan muy ricos!!!!!!
Mil besos a todos.
Penny